Dehesa los LLanos, tradición y sostenibilidad sin lactosa

Situada a 5 kilómetros de la ciudad de Albacete, Dehesa de Los Llanos es conocida en todo el mundo por la calidad de sus productos, especialmente por sus quesos reconocidos a nivel internacional. Su historia se remonta a 1647, cuando una congregación de monjes franciscanos se estableció allí y se dedicó a la agricultura y la ganadería. Durante la desamortización de Mendizábal (1836), la propiedad pasó a manos del marqués de Salamanca hasta que en 1893 fue adquirida por el marqués de Larios.

En sus 10.000 hectáreas, se producen todos los ingredientes necesarios para elaborar el “Mejor Queso del Mundo”, según el World Cheese Awards 2012; así como el mejor en la categoría “Queso de Oveja de pasta dura” (con una maduración de entre 0 y 3 meses), título obtenido en el World Championship Cheese Contest 2020. En nuestro buscador conocerás su gama completa sin lactosa.

Desde el siglo XVII, Dehesa de Los Llanos ofrece productos originales, transmitiendo la personalidad de la tierra donde se producen y el cariño de las manos que la cultivan. Uno de sus secretos para preservar la finca establecida en 1647 por monjes franciscanos, son las iniciativas de sostenibilidad, enfocadas en optimizar recursos y preservar el entorno para las futuras generaciones. La identidad de la finca es la realización simultánea de las actividades para preservar el medio, por ejemplo, el suero del queso se utiliza en el estercolero, acelerando la descomposición y favoreciendo el compostaje de los residuos sólidos, generados por la ganadería, empleándolo más tarde como fertilizante en agricultura. Con la instalación fotovoltaica se ha evitado la emisión de 1.500 toneladas de CO2anualmente. También se aplican modernas tecnologías de riego por goteo y pívots, pudiendo irrigar de manera más eficiente.

Dehesa de Los Llanos ha mantenido intacta la zona de la Dehesa desde el siglo XVIII, acogiendo abundantes especies de flora y fauna, como las ovejas de raza Manchega, cuya leche cruda se utiliza para elaborar el Mejor Queso del Mundo. Para el fomento de la biodiversidad, se mantienen liendros y ribazos y se crean bosquetes arbustivos entre las parcelas de producción agrícola de regadío.